Dedicado a Luís Haro
/ˌgʊd’baɪ/
No es así,
De ninguna manera...
Doblegar el cuerpo hacia la calma, construir el sosiego no es tantas veces posible.
Saberse excluido de la inmortalidad por haber querido dibujar una vida sin rastros, llena de marcas pero invisibles, de gestas silenciosas...
Cuando cada sol en la cara es un triunfo y cada gota de sudor una victoria entonces sólo queda reír...
Y sobre el dolor, qué decir? Cómo aproximarse a la posibilidad de explicarlo, describirlo en su totalidad y de manera comprensible para quién no lo padece...
El dolor es un límite, traspasarlo/trascenderlo, una habilidad...
Superarlo no deja de ser una cuenta atrás, a veces infinita.
”...de los pliegues de la SOLEDAD”. Jorge Albuerne (2021)
Jorge Albuerne completa su trilogía CRECE con un nuevo espectáculo en el que quiere hablar de la pérdida, de la despedida:
Estos últimos tiempos han estado marcados por multitud de despedidas, de pérdidas, de ausencias, desencuentros..., de impotencias y de situaciones injustas en aras de una “salud colectiva” o del “derecho a la autodefensa”.
La pandemia, en su momento, y los diferentes conflictos bélicos actuales nos ha dejado muchas partidas y tantos o más duelos inconclusos..., sin hablar del control, la pérdida de libertades o el renacimiento de discursos en contra de los derechos humanos y la memoria...
Me gustaría poder reflexionar aquí sobre la DESPEDIDA y llegar a generar en torno a este concepto, y sus formas o manifestaciones, otros contextos que puedan desencallar o sublimar estos duelos atorados o incompletos...
No una solución sino, más bien, una oferta de posibilidades desde la escena...
También con la intención de recuperar esa función de ceremonia comunitaria, de dispositivo de reflexión y crisis y de voluntad de cambio que tienen el arte y la escena.