26 de septiembre de 2023

Escribe Clara

Foto: Gaby Merz

Y ya está, ya ha pasado.

El viaje ha terminado.

Aquí en casa sigo asimilándolo. Ha sido un viaje emocional, intenso, interesante, nutritivo y corto, muy corto.
 
Aún sigo allí, en la pista del CRECE, calentando y estirando con los compañeros en la pista, sintiendo los nervios del estreno, compartiendo las reflexiones y debates sobre arte, escena y vida. Las reuniones al solecito y los estrenos mañaneros a fuego (los circenses estamos un poco obsesos pues si la quedada era a las 10h.,  a las 9h. se entrenaba, me encanta :) y me sigue sorprendiendo esas ganas del circense).

CRECE me ha aportado mucho a nivel emocional, artístico y humano. Una experiencia vital donde me he encontrado a gente increíble que me ha aportado mucho conocimiento ya no solo a nivel técnico pero artístico. Nuevas formas de trabajo, búsqueda y creación donde poder indagar y profundizar sobre mi movimiento escénico y sobre el que queremos y como lo queremos contar. Ha sido corto e intenso, pero precisamente por eso, en los momentos de creación a contra reloj aflora el individuo, la personalidad más sincera de cada uno y conocernos mejor, de verdad (que puede gustar o no). Incluso reconectar con mi yo interno, me ha sorprendido. Siempre ir más allá, de dentro a afuera, y como nos pregunta nuestro director Lucio, ¿cuántos cm. de más hay que mover la cadera para que deje de ser normal y pase a estar fuera de contexto?
 
¿Existe un fuera de contexto apalabrado? ¿Dónde está el límite?

A veces me siento así. Fuera de contexto. Fuera de un estilo de vida normalmente establecido. A veces frustrante, pero, ¡me aporta tanto! Y aquí seguimos!

CRECE me ha permitido compartir esa misma sensación con gente donde verse reflejada. Un espacio de conexión, reunión y reflexión con gente de circo, en un espacio tan increíble como es el Price, para mí.

¿Qué tiene este lugar? ¿Qué tiene la pista? ¿Qué tiene esa gente de circo que tanto me atrae? ¿Lo familiar? ¿La cercanía? ¿Lo circular? ¿Lo espectacular? ¿Lo emocional?

En definitiva, en conclusión, nos gusta el circo. Nos gusta "volar". Nos gusta la adrenalina. Nos gusta emocionar. Emocionarnos. Nos gusta compartir(lo) en escena.

SALUD Y CIRCO

Clara Bernet

Foto: Gaby Merz