En cuarentena. La luz del sol entra levemente por mi ventana. La careta de la Pizarnik me mira de reojo desde el angulo izquierdo de la habitación....
ALEJANDRA: ¡Levantate, perezosa!... Ni me has dedicado una líneas desde que volviste de Madrid.
LAURA: eh....
ALEJANDRA: ¿No estarás buscando una excusa?
LAURA: No…, o sea, sí. No he tenido tiempo, la verdad.
ALEJANDRA: ¿Tiempo?… El tiempo de los vencedores es siempre corto pe…
LAURA: Ufffff… (Le interrumpe bruscamente) Que tía plasta. Está bien, está bien. ¡Me pongo a ello!
Han pasado casi dos meses desde que el CRECE terminó y Alejandra, Pinochet y algún que otro recuerdo material pululan por mi casa. Todo sigue muy presente. Ver los videos, las fotos, releer los textos, nuestras reuniones por skype… me traen a la mente un montón de bonitos recuerdos de esta experiencia: buena gente, hermoso teatro, gran equipo de profesionales muy involucrado, apoyo, sentido del humor, política, ganas de crear, risas-vermut-tarot-twerking (y viceversa), familia, dolor de cuero cabelludo, trabajo de coordinación, nervios, ilusión, confusión, arte, locura, querer quedarse queriendo irse, pasión por tu trabajo… crecer.
Fue una bomba de relojería concentrada en tres semana de intenso trabajo. Cansancio y estrés del rico, del que a uno le da confirmación de que no hay nada más placentero que trabajar en lo que a uno de verdad la gusta. Eso latiendo fuerte dentro de mí y una enorme gratitud porque esta oportunidad haya ocurrido en mi vida y por todas las personas que han puesto su granito de arena para que pasase.
ALEJANDRA: ¡Cuántos halagos! Ni que no hubieses pensado nunca en que no sabías por donde iban lo tiros…
LAURA: Jejejejeje… (risa de compromiso)…, bueno, es cierto que a veces estaba más perdida que un pulpo en un garaje, sí… O sentía que todo era demasiado abstracto, confuso… pero… pero ni que tú fueras muy clara con tu poesía, ¡eh! Dime tú a mí qué es eso de el gran pájaro de cuerpo de paja teclea el invisible piano de viento
ALEJANDRA: (mirando de reojo. Como siempre) Esta clarísimo.
LAURA: Y eso de Si un mar por una lira ángeles furiosos ahogó en el viento
ALEJANDRA: (continua mirando de reojo) Evidente.
LAURA: Y te tiraste bien el rollo con eso de aproximaciones… ¿aproximaciones a qué?
AUGUSTO: Chiiiiicas, chicas…, no vamos a entrar en discusiones a estas horas de la mañana. Os propongo una pequeña dinámica para favorecer la cohesión de grupo. Escribamos un cuento conjuntamente. Yo empezaré con la frase: Había una vez un caudillo muy bueno al que todo el mundo amaba…
LAURA Y ALEJANDRA: Y un buen día se murió.
ALEJANDRA: ¿Un cafecito?…